Mila y Marco tenían fecha para su civil el 20 de marzo de 2020. Ese día, en Argentina, arrancó el Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio. Pero hoy no vengo a contarles esa parte gris del cuento, solo voy a hacer foco en el final feliz, porque 10 meses despues de la fecha inicial, pudimos (sisi, nos sentimos parte) gritar Sí, Quiero y a los cuatro vientos. 

La primera vez que me reuní con Mila en la oficina, estuvimos un par de horas hablando. Justo fué un día que yo estaba sola, y Marco tampoco pudo venir, asi que nos sentimos en una charla de amigas de toda la vida. No hizo falta que me diga mucho más después de esta frase: “vengo organizando mi casamiento desde que pasó mi fiesta de quince” y ahí entendí todo. 

Los chicos llegaron a EB con una fiesta desde su punto de vista “resuelta”, pero mamiiita! Los cabos sueltos que había! Tuvimos que reflotar un casamiento con algunos parches, para que después aparezca el virus y nos haga empezar de cero. 

El de los chicos fue uno de los eventos que más nos costó reprogramar, simplemente porque no querían saber nada. Me acuerdo que suspender ese festejo post civil me dolió mucho, pero mucho. Y así arrancamos una locura de fechas, con ellos llegamos a reprogramar 5 veces… 

En el medio, no podemos negar que nos divertimos, los novios fueron los protagonistas de “Tu boda en casa”, nuestra actividad al inicio de la pandemia para animar a aquellos novios tristes y no solo la rompieron, sino que hasta salieron en el noticiero.